Nicolás Pino recibió una caja que se incendió en cuanto la abrió su secretaria. La Justicia investiga quién lo envió y la Policía de la Ciudad activó el protocolo de descontaminación por sustancia desconocida.
La policía detuvo a cuatro personas que les exigían dinero a las víctimas para no involucrarnos en causas falsas por pedofilia o prostitución. Uno de ellos operaba desde la cárcel de Lisandro Olmos.
