El gobierno dice que los supermercadistas reconocieron que aumentaron por encima de la inflación y como represalia les abrirán las importaciones y bajarán impuestos.
El Banco Central bajó drásticamente la tasa que se paga por los plazos fijos. En el mercado interpretan que se trata de una "feroz licuación de pesos para acelerar la dolarización".
El ministro de Economía convocó a una reunión de urgencia con supermercadistas. Les pidió que frenen "subas desmedidas" y se adapten "a la nueva realidad económica".