Las designaciones de Diputados quedaron trabadas y en abril se renuevan los lugares de la Cámara Alta.
Javier Milei evalúa patear la definición de los tres lugares para representantes de la Cámara de Diputados en la Auditoría General de la Nación hasta 2025, justo cuando vencen los mandatos de los tres auditores por el Senado.
«Van a seguir pisando el tema hasta que, en abril, se venzan los mandatos de los tres senadores y se discutan las dos cámaras a la vez», deslizó una fuente del Congreso.
La discusión se había trabado en marzo de este año, razón por la cual la AGN funcionó con cuatro de sus siete miembros desde abril. LPO informó las tensiones alrededor de la negociación por completar la conformación del organismo de control: mientras que el peronismo reclamaba dos plazas, por la cantidad de diputados que integran el bloque, la UCR impulsaba a Mario Negri, el PRO a Jorge Triaca y los libertarios promovían a Santiago Viola.
Sin embargo, el período de sesiones ordinarias se está por terminar y las vacantes siguen sin cubrirse. Por eso, los diputados al tanto de la conversación interpretan que el acuerdo, si se logra, se daría en abril del año entrante.
«Es un chino, está trabadísimo pero la idea es que le den al PRO algo en Senado y pongan a Viola en lugar de Triaca en Diputados», deslizaron en un despacho de la Cámara Baja.
Semejante maniobra no sería sencilla porque el Senado designó hasta 2025 a Javier Fernández y María Graciela de la Rosa por el PJ y Alejandro Nieva por el radicalismo. Otorgarle un nombramiento al macrismo implicaría quitarle uno al peronismo o la UCR pero el formoseño José Mayans podría defender con ferocidad las dos plazas de su partido y la UCR no cederá su lugar alegremente.
Esa neutralización política mantuvo la AGN semivacía durante el primer año de mandato libertario. Hasta en la primera reunión de la Comisión Bicameral Mixta Revisora de Cuentas, presidida por Miguel Pichetto, legisladores de distintas fuerzas políticas reclamaron al oficialismo por la demora.
En esa ocasión, Olmos presentó el plan de la AGN para el año próximo y le marcó la cancha a la Casa Rosada. Anunció que auditarán a la Secretaría de Políticas Universitarias, al tiempo que Nievas apuntó directamente contra Karina Milei: «Hace mucho que no auditamos la secretaría general de la Presidencia», dijo.
Lo que hasta ahora se comenta en voz baja es que la razón por la cual el gobierno frenó las designaciones en 2024 estuvo vinculada al perfil de Viola, apoderado del partido que llevó a Milei a la victoria. Según confiaron a LPO en un despacho de LLA, el abogado que el Presidente quiere en la AGN es asesor letrado del sindicalista Alejandro Poli, titular de la Federación Argentina de Remiseros.
Ex kirchnerista, luego macrista, más tarde albertista y finalmente mileísta, Poli está pendiente de una causa por falsificación de documento público que instruye el juez Daniel Rafecas y Viola sería su abogado. «Está más sucio que una papa», dijeron a LPO.
Por lo demás, Martín Menem logró atravesar el año parlamentario dilatando la definición de los lugares en la Auditoría mientras negociaba con las bancadas aliadas el apoyo para la ley bases, el paquete fiscal y el blindaje a los vetos de Milei. Un radical definió el escenario como «un pantano», y agregó: «Evidentemente el mileismo se maneja bien en ese pantano, son todos urbanomarginales».