El Masters 1000 de CIncinnati fue protagonista de uno de los mayores escándalos que se vivieron en el mundo del tenis. Durante el partido entre Jack Draper y el canadiense Félix Auger-Aliassime que se disputó en la madrugada del viernes al sábado, el tenista británico hizo una volea, pegó en su propio campo y pasó al área rival. Lo que era un punto claro para Aliassime, para el umpire Greg Allensworth fue “punto, set y partido” para Draper, lo que generó un enorme revuelo enorme en el deporte.
A raíz de este hecho, varios tenistas opinaron al respecto mediante sus redes sociales y uno de ellos fue Novak Djokovic. El serbio lo hizo a través de su cuenta de X. “Es vergonzoso que no tengamos una repetición en video de este tipo de situaciones. Lo que es aún más ridículo es que no dispongamos de la regla que permita al juez de silla modificar la decisión inicial basándose en revisión en video que se ve fuera de la pista”, comenzó.
Y, en ese sentido, agregó: “Todo el mundo que vio la TV sabe qué pasó en la repetición, pero los jugadores se quedan en la “oscuridad”, sin saber cuál es el resultado. Tenemos ojo de halcón para las líneas, vivimos en el tecnológicamente avanzado siglo XXI. Por favor, dirigentes del circuito ATP, asegúrense de que esta tontería no vuelva a suceder”, sentenció.
Así fue la jugada en el Masters 1000 de Cincinnati que terminó en escándalo
Jack Draper venció a Felix Auger-Aliassime con un golpe ilícito que el umpire no vio y volvió a instalarse la polémica sobre la asistencia de video.
