El armador de La Libertad Avanza en la provincia, Sebastián Pareja, terminó involucrado judicialmente en la denuncia contra la banda del Opus Dei, integrada por el diputado nacional Santiago Santurio y los legisladores bonaerenses Agustín Romo y Nahuel Sotelo.
Cercano a Karina Milei desde los albores del ascenso libertario, Pareja habría quedado pegado por los contratos de la OEI que firmó la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, otra de las funcionarias apuntadas en la investigación. El expediente es impulsado por el periodista Christian Sanz y recayó en el juzgado Criminal y Correccional Federal Nº 6, donde subroga el juez Ariel Lijo, candidato del presidente Javier Milei para ser ministro de la Corte Suprema.
En la carátula de la causa, figuran los delitos de extorsión, abuso de autoridad, violación de los deberes de funcionario público, negociaciones incompatibles y malversación de caudales públicos. Además de Pareja, Pettovello, Santurio, Romo y Sotelo, también se acusa a Joaquín De la Torre, ex intendente de San Miguel y senador bonaerense, y Carlos Torrendel, secretario de Educación.
En medio de la crisis entre Pettovello y Karina Milei que reveló LPO, la incorporación del nombre de Pareja en el expediente judicial se interpreta en el gabinete nacional como una de las esquirlas que impactó en un hombre cercano a la secretaria general de la Presidencia. «Está quedando expuesto que el gobierno está en manos solamente de Karina y Santiago Caputo, mientras no encuentran un cortafuegos que salve al Presidente del incendio de Pettovello», dijo una fuente cercana al entorno del Jefe.
Aunque un sector de LLA trata de despegar a sus representantes parlamentarios en el Congreso y en la Legislatura bonaerense, LPO informó que Santurio es el padrino del espía Federico Salvatierra en la dirección de Apoyo Judicial de la Policía de San Miguel y, según testimonios de efectivos de esa fuerza, sería incluso el ideólogo de su creación.
En el municipio, deslizan además que Romo no necesita el dinero de los contratos para sí mismo, en tanto su tío es dueño de estaciones de servicio y su familia nunca pasó malestar económico, pero apela a esos recursos «para hacer caja» y «pagar a algunos de los trolls en las redes».
La explosión del escándalo de corrupción y sus derivaciones judiciales agudizaron, por otra parte, las internas libertarias. Después que LPO anticipara el sábado pasado la radicación de esta denuncia, Santurio, Romo y Sotelo fueron citados a la Casa Rosada, donde se estima que fueron duramente sermoneados por la hermana del Presidente. «Están hasta las bolas», dice un hombre que avisora que el caso puede comprometer la suerte de Milei y ya se ilusiona con jugar para la vicepresidenta Victoria Villarruel.