Con las nominaciones de sus partidos prácticamente garantizadas, el presidente estadounidense, Joe Biden, y su gran rival, el ex mandatario Donald Trump, arreciaron sus campañas este sábado en el decisivo estado de Georgia, donde cada uno dibujó un país diferente y los ataques estuvieron presentes, especialmente por parte del republicano.
Los mítines que se realizaron a la misma hora y a poco más de 100 kilómetros de distancia representan un punto de partida de lo que serán los próximos ocho meses de campaña en una pelea por los conocidos estados ‘bisagra’, como Georgia, donde Biden ganó en 2020 por apenas 11.779 y Trump enfrenta una batalla legal por sus esfuerzos en esa elección para que el demócrata no le arrebatara el estado.
En el centro histórico Pullman Yards en Atlanta, Biden aprovechó el momento para recordar que en la elección pasada logró la primera victoria en Georgia de un candidato demócrata a la Presidencia en casi tres décadas, desde la de Bill Clinton en 1992 y animó a sus electores a hacer la diferencia nuevamente en noviembre para continuar con su agenda y defender el derecho al voto y luchar por convertir en ley el derecho al aborto.
El mandatario estadounidense destacó sus logros en estos tres años y también utilizó su discurso para cargar contra el ex presidente Donald Trump (2017-2021) y advertir el escenario que le espera al país.
“Cuando dice que quiere ser un dictador, le creo”, dijo Biden sobre el republicano. “Nuestras libertades estarán literalmente en la boleta electoral de este noviembre”, agregó.
Del otro lado, en el Forum River Center de Roma, una ciudad al suroeste de Atlanta, Trump arremetió contra su oponente. “Si él (Biden) es lo mejor que un partido puede nominar estamos en problemas”.
El republicano nuevamente hizo de la inmigración parte del tema central de su discurso y culpó nuevamente a Biden de la muerte de la estudiante de la Universidad de Georgia Laken Hope Riley, asesinada supuestamente por un migrante indocumentado.
“Joe Biden no tiene remordimientos, no se arrepiente, no tiene empatía, no tiene compasión y, lo peor de todo, no tiene intención de detener la invasión mortal que le robó la hermosa vida estadounidense a la preciosa Laken”, señaló Trump, que se reunió con los padres de la estudiante antes de comenzar su discurso.
La muerte de la joven ha sido capitalizada por los republicanos para culpar a la Administración Biden por la ola de indocumentados que ha llegado por la frontera sur del país.
Trump también criticó a Biden por disculparse por usar el término ilegal al referirse al sospechoso indocumentado cuando habló del caso en el Discurso del Estado de la Unión el jueves pasado.
“Se trata de personas indocumentadas. No debería haber utilizado ilegal”, afirmó el mandatario estadounidense este sábado en una entrevista con la cadena MSNBC.
“Yo si voy a decir que él era un inmigrante ilegal, el nunca debió estar en nuestro país, y él nunca hubiera estado en nuestro país bajo la política Trump”, dijo el republicano en medio de aplausos.
También prometió implementar la máquina de deportación más grande de la historia y añadió que si es reelegido va “a usar todas las herramientas a su disposición” para deshacerse “de los monstruos que Joe Biden liberó”.
Por su parte, el presidente ofreció sus condolencias a la familia de Riley y pidió al Congreso aprobar un proyecto de ley de seguridad fronteriza que no avanzó en el Senado el mes pasado por la oposición republicana.
Este sábado cada uno de los aspirantes diferenció su visión del país e incluso la de sus votantes para afianzarse en Georgia, un estado que en el pasado fue un bastión republicano, y donde ambas campañas están poniendo grandes esfuerzos.
La primera dama Jill Biden había visitado el estado recientemente y este sábado fue quien presentó a su esposo. Mientras los republicanos liderados por la congresista Marjorie Taylor Greene están tratando de alejar la atención a la batalla legal que Trump enfrenta por interferencia electoral en ese estado, y por la que fue reseñado por la policía.
Georgia celebra este próximo martes sus primarias, junto con Hawaii, Misisipi y el estado de Washington, resultados que seguramente le darán la victoria tanto a Biden como a Trump para ser nominados como candidatos de Partido Demócrata y el Partido Republicano, respectivamente.