Una mujer se reunió con su exjefe para exigirle que le pague una deuda y todo terminó de la peor manera. Su cuerpo fue encontrado sin vida, tirado en la calle, envuelto en una frazada. Las cámaras de seguridad de la zona, le permitieron a los agentes policiales identificar a los sospechosos: el exempleador y su novia.
El hecho ocurrió en la ciudad de Villa Ballester, ubicada en el partido General San Martín, en la zona norte del Gran Buenos Aires. La víctima, identificada como Antonella Striano, murió por una insuficiencia cardíaca provocada por un fuerte golpe en la cabeza.
Los vecinos de la zona alertaron la presencia de un cuerpo envuelto en ropa de cama en la intersección de las calles Colón y Artigas y dieron aviso a las autoridades policiales. Los efectivos llegaron al lugar, confirmaron que se trataba del cadáver de una mujer e iniciaron una investigación. Al revisar las cámaras de seguridad instaladas en las inmediaciones descubrieron que un hombre y una mujer habían sido quienes tiraron el cuerpo en la vía pública.
Los investigadores observaron en las imágenes de la filmación que un hombre bajó el cuerpo ya envuelto de un auto marca Mercedes Benz y lo dejó en el lugar en el que fue encontrado horas más tarde. Mientras que una mujer vigilaba para asegurarse de que no sean descubiertos por nadie. Después, se subieron al coche y abandonaron la escena.
El caso quedó a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción N°5 y la DDI de San Martín que ordenaron una autopsia. El resultado arrojó que la mujer fue golpeada en la cabeza y eso le provocó fallas cardíacas que derivaron en la muerte. Tras indagar al entorno de la víctima, supieron que tenía pautada una reunión con su exjefe para exigirle que le pague una deuda de dinero que había quedado pendiente.
Con los testimonios recopilados y las imágenes obtenidas por las cámaras, los investigadores llegaron a M.A, un hombre de 54 años propietario de un maxikiosco y exempleador de la víctima. Al llegar al domicilio lo detuvieron y secuestraron el Mercedes Benz que aparecía en la filmación, con en el que se presume que trasladaron a la víctima. Luego, se acercaron al kiosco que estaba ubicado a pocos metros del domicilio y se encontraron con una mujer, identificada como S.M.D.C de 37 años, que sería la que lo acompañó a deshacerse del cuerpo.
Ambos quedaron detenidos a disposición de la Justicia. El hombre fue imputado por presuntamente haber cometido el delito de homicidio agravado por violencia de género, mientras que la mujer, fue imputada por homicidio simple.
En cuanto a los motivos que desencadenaron el asesinato, aún están siendo investigados, aunque se cree que pudo haber sido la deuda pendiente. Ahora se espera que los sospechosos declaren para conocer su versión de los hechos y definir su situación procesal.
